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A comienzos de este mes se volvió viral una noticia que informó sobre un fallo del gobierno de Santa Cruz de permitir la caza de pumas, guanacos y zorros desde el primero de abril hasta el 30 de junio. Esta resolución generó un fuerte descontento social, provocando que las redes sociales se saturen de posteos repudiando esta medida.
En este artículo vamos a indagar sobre las causas de esta medida, el por qué de la viralización de estas noticias en particular y si existen alternativas para preservar a la fauna.
El problema del problema
El detonante de esta medida es un informe del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) titulado “Percepción sobre el impacto de la depredación y el desempeño de métodos para su mitigación en sistemas ganaderos de Santa Cruz” en el cual encuestaron a 83 establecimientos agropecuarios de la provincia, cuya principal actividad económica (en un 88%) es la producción ovina, ocasionando así una pérdida económica y productiva de este sector.
Los resultados obtenidos indicaron que la mayor causa de pérdida de ganado es por depredación por zorro colorado y puma, seguido por causas climáticas y en tercer lugar el ataque de perros salvajes.
Para evitar las pérdidas, los productores utilizaron diferentes técnicas como la cacería, el encierre, jaulas y trampas, siendo estas poco efectivas y ocasionando tanto desórdenes ecológicos como pérdidas económicas.
Ante esta situación, las autoridades de Santa Cruz decidieron el pasado 27 de marzo emitir la resolución 117/2024, firmada por Adrián Suarez, Presidente del Consejo Agrario Provincial, que permite la caza de:
Zorro colorado: 1 por semana
Zorro gris: 1 por semana
Puma: 1 por semana
Además en mencionan a las especies exóticas como la Liebre Europea, el Conejo Europeo, el Jabalí y el Visón Americano, para los cuales no hay un límite de individuos para la caza. De las especies exóticas voy a hablar en otro artículo, así que por el momento nos vamos a centrar en los depredadores autóctonos.
Fragmento de la Resolución N° 117/2024 que permite la caza en la provincia de Santa Cruz.
¿Es un deporte ir de caza?
Este es un término que suele confundir al común de las personas (lo cual es completamente normal) ya que se asocia a la palabra deporte como lo conocemos en la cotidianidad, lo que indicaría que la actividad se estaría realizando por placer y hasta de forma competitiva.
Según la Ley de Fauna Silvestre, la caza deportiva es aquella que se practica con elementos permitidos y sin fines de lucro a especies que estén permitidas por normativas provinciales. En este caso en particular, los pumas y los zorros son consideradas especies perjudiciales, las cuales se clasifican entre aquellas que infligen daños siginificativos a la producción de bienes económicos.
Entre la empatía y el “Clickbait”
Si bien hubo un repudio centralizado a la caza deportiva de estos animales en redes sociales (el cual celebramos) es importante mencionar que la empatía humana hacia ciertas especies animales, como el puma y los zorros, en comparación con otras, puede estar influenciada por varios factores, lo cual es utilizado por los medios para llamar la atención con algún objetivo, desviando el foco sobre el tema y la importancia del mismo, sin realizar un enfoque integral.
La foto del puma en alta definición, el conflicto con los grupos ambientalistas y la falta de información en las publicaciones dan por sentado una postura preestablecida sobre los acontecimientos, sin evaluar las demás aristas de estos eventos, con sus causas y consecuencias.
Publicaciones de Instagram de Clarín y Austerra.
Las alternativas
Para abordar de manera efectiva las cuestiones relacionadas con esta temática, es importante considerar las dos dimensiones clave del problema: la caza de especies con un papel significativo, debido a que tienen un rol fundamental en las interacciones ecológicas y la pérdida de ganado que enfrentan los productores agropecuarios de Santa Cruz.
Teniendo en cuenta que la caza deportiva es la última instancia a la que se debería llegar, existen varias formas de mitigar la depredación del ganado sin que estas representen un gasto económico elevado.
La primera es la utilización de perros protectores del ganado, un estudio del INTA desarrolló sobre el uso de estos animales como medida preventiva ante esta situación y destaca los buenos resultados y lo amigable con el ecosistema que es esta práctica, teniendo como referencia a nuestros países vecinos.
Perro pastor cuidando ovejas en un campo rionegrinos.
Otra alternativa a tener en cuenta que brilla por su efectividad son las luces destellantes: dispositivos luminosos que de noche se activan generando luces de forma cíclica con el motivo de ahuyentar a los depredadores. Estos instrumentos son tan eficaces que en campos donde se pierden producciones enteras por amenaza de pumas y zorros se han vuelto a reanudar proyectos sin ninguna pérdida en el ganado.
Es de vital importancia el monitoreo de estos casos y el trabajo en conjunto de los productores, así como la evaluación de la eficacia de los métodos y las medidas implementadas para mitigar esta situación.
La protección de fauna autóctona como medida de conservación
Aunque algunos productores apoyan la idea de restablecer el sistema de recompensas por la caza de depredadores, es importante señalar que esta propuesta es inviable debido a su ineficacia, falta de beneficios económicos duraderos y por sobre todo la pérdida de fauna, alterando la dinámica ecológica de la región. Esto indica que, si bien las soluciones a corto plazo pueden ser tentadoras, es crucial implementar estrategias que prioricen la sostenibilidad y el equilibrio a largo plazo. Hay que proteger a la fauna autóctona, así como garantizar una producción estable (y sostenible) al sector agropecuario de Santa Cruz.
Desde la revista los invitamos a pensar desde otra perspectiva las problemáticas más virales y populares, buscando información en otros sitios y evaluando los pro y contras de situaciones controversiales. Es mediante este enfoque que se logra comprender de manera óptima al ambiente.
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